La imposibilidad de participar en dos rallyes del Campeonato de Cataluña de este año debido a la coincidencia con pruebas del Campeonato del Mundo de Bajas hicieron que el equipo PONS Rallysport se viera obligado a jugarse el campeonato en la última cita de la temporada, el Rally 2000 Viratges.

Organizado por el Biela Club Manresa, se cumplían las 61 ediciones siendo una de las pruebas más antiguas del país. Un imprevisto a solo diez días del rallye hacía aplazar los reconocimientos previstos para el fin de semana anterior, desembocando en una cadena de eventos que llevaban a Pons a buscar in-extremis un nuevo copiloto. Tras contemplar distintas opciones, el asturiano Adrián Pérez se sumó  al reto del equipo catalán en la lucha por el campeonato.

Los 113 kilómetros contra el cronómetro, más de la mitad de los cuales se disputarían de noche, divididos en un total de 14 tramos cronometrados dejaban 44 puntos en juego. Hasta el momento, Eduard Pons contaba con 9 puntos de ventaja sobre el piloto de Osona Albert Orriols, muy experimentado sobre asfalto. El planteamiento de la prueba era claro: rodar con la suficiente rapidez para impedir que su rival sumara puntos de tramo pero a la vez no cometer errores que pudieran acondicionar en exceso el resultado final.

En el primer bucle de la mañana, Pons-Pérez fueron los más rápidos en 2 de los 3 tramos y se colocaron al frente de la clasificación, pero una mala elección de los neumáticos en la repetición del bucle les hacía bajar una posición. Se llegaba al ecuador de la prueba con 2 puntos para Pons y dos para Orriols, con el de Vic en el primer lugar de la clasificación provisional.

Los tramos de la tarde eran del agrado del leridano y en una tercera sección formada por 4 tramos, Eduard y su copiloto Adrián eran los más rápidos en dos, acercándose al liderato. Todo parecía bajo control pero aún faltaban 32 km cronometrados para sentenciar el resultado. Los de PONS Rallysport no bajaban la guardia y aún conseguían otros 2 scratch para asegurar la segunda posición final, válida para coronarse Campeón de Catalunya por cuarta temporada consecutiva, la primera con el apoyo de MAPO Motorsport.

En la llegada al pueblo de Artés, Eduard comentaba: “Ha sido un campeonato condicionado por el accidente en el Rally Lloret a principios de la temporada. La combinación con la disputa del Campeonato del Mundo de Bajas nos ha dificultado seguir el certamen catalán pero poco a poco lo hemos ido encaminando. Tres victorias y la buena actuación en este 2000 Viratges nos han acabado dando el título. Estamos contentos porque es nuestro cuarto campeonato consecutivo, pero hoy damos por terminado un episodio en Cataluña que nos traerá nuevos e interesantes retos en breve”.

Sin tiempo para descansar, esta misma semana todo el equipo viajará hasta Dubai para competir en la última prueba de la FIA World Cup for Cross-Country Bajas, que comienza el día 1 de diciembre en los Emiratos Árabes Unidos, con el objetivo de intentar subir al podio final del campeonato. Un reto difícil pero que Pons quiere luchar hasta el final.